La forma higiénica de utilizar nuestros cosméticos.

En lo que a higiene cosmética se refiere, hay mucha gente que cae en el error de pensar que con lavar nuestras brochas y pinceles una vez a la semana (en ciertos casos puede resultar excesivo) tienen más que suficiente y que cumplen con las normas de higiene, pero debemos de pensar que limitar la limpieza a los pinceles no es una forma segura de garantizar la salud de nuestra piel.


Me gustaría hablaros de la importancia de higiénizar nuestros cosméticos no sólo desde el punto de vista de una maquilladora que utiliza sus productos para maquillar a diferentes personas y debe desinfectar cada pincel al finalizar el maquillaje, también a nivel de usuario como prevención de infecciones indeseadas.
Estas recomendaciones debemos de adaptarlas a la forma y frecuencia con la que cada uno da uso de su material. No es lo mismo usar una brocha para aplicar la base de maquillaje fluida que debemos lavar tras su uso, que utilizar bases en polvo, ni tampoco el tipo de pelo con el que nos guste trabajar. Las brochas sintéticas permiten lavados más continuados.
 La intención de estos cuidados es la de alargar la vida de nuestros materiales de trabajo y prevenir infecciones en nuestra piel evitando el uso de productos contaminados.

Con nuestro material de trabajo ya sea de uso personal como profesional podemos sin darnos cuenta trasmitir bacterias y estas pueden producir infecciones en nuestra piel.
En el uso personal debemos ser cautos, si estamos sufriendo un brote de acné, tenemos un herpes labial ó sufrimos la aparición de orzuelos en los ojos, estamos obligados a extremar estas precauciones.
 En estos casos lo ideal seria siempre utilizar aplicadores desechables, pero como no suele ser algo que tengamos habitualmente en casa, una forma de prevenir el contagio a otras zonas del rostro sería pasando los pinceles y brochas por un limpiador de brochas que por norma general suelen contener alcohol, con este paso eliminaríamos las bacterias que hayan podido quedar en nuestros pinceles.

Este gesto no excluye su limpieza cada 15 ó 20 días con agua y jabón para eliminar todos los restos de maquillaje que hayan quedado entre los pelos (en este punto quiero aclarar que la brochas y pinceles sintéticos no conviene desinfectarlos con alcohol). Lo ideal sería limpiarlas después de cada uso, cierto es que nuestro ritmo de vida no ayuda en este punto.

Con los labiales ocurre algo muy parecido. Si somos conscientes de que otra persona los haya podido usar, ya sea porque los hemos prestado, (algo muy normal entre nosotras) ó porque hayamos trabajado con ellos, es bueno sumergirlos en acohol de 70º unos segundos y secarlos con papel para eliminar cualquier residuo.

Con los lápices de ojos ó de labios haríamos lo siguiente:
Sacarles punta para eliminar las zonas contaminadas y frotarlos en un papel. Los de labios se pueden sumergir en alcohol pero los de ojos no lo recomiendo y menos si los solemos usar en la linea de agua.

Los productos en polvo (sombras, coloretes, compactos, iluminadores...) si sospechamos de que puedan estar contaminados podemos pulverizarlos con alcohol, si no es el caso, con pasar un papel y eliminar una fina capa es más que suficiente, no es necesario que sea de forma continuada, basta con hacerlo si llevamos tiempo sin usarlos.

En las bases lo ideal es tenerlas siempre con dosificador, pero es cierto que muchas marcas no disponen de dosificador (muy mal por su parte) en estos casos creo que todas tendemos a hacer lo mismo, verter una pequeña cantidad sobre el dorso de la mano y aplicarlo desde ahí con la ayuda de un pincel ó una esponja.

El resto de productos que vengan con aplicador como por ejemplo los gloss, correctores y máscaras, no se debe de aplicar el producto con estos aplicadores porque de esta forma contaminamos todo el producto del envase. Para evitarlo existen desechables para cada uno de ellos, yo personalmente aconsejo depositar el producto en una espátula de maquillaje y aplicarlo desde aquí. Para las máscaras de uso personal no veo necesario el uso de desechables.

Esta sería mi forma higiénica de usar nuestros cosméticos, espero que os haya gustado y a ver si os animáis y me contáis como lo hacéis vosotras!
Que paséis un buen finde y hasta la próxima.